martes, 20 de diciembre de 2016

Composición Corporal (objetivo pérdida de peso y % de grasa corporal)

Hace un año de este caso.

Se cumple un año de estas palabras, pero como los hechos son más importantes que la semántica, aquí expondré la situación actual de esta misma persona:

—Aunque podría hacerlo más denso, en el siguiente texto voy a intentar no explayarme demasiado, pero sí mostrar y demostrar un ejemplo de parte del trabajo realizado (en este caso con un objetivo de mejora de la composición corporal), especialmente, por parte de las personas que confían en mi trabajo—.

Tal y como describí en un primer momento, las primeras sesiones fueron, lógicamente, tutorizadas; de aprendizaje y familiarización con el sistema de trabajo empleado. Si bien, necesitamos más tiempo del indicado a priori, enseguida se adaptó al programa propuesto y en cuestión de cuatro meses ya estaba haciendo las sesiones de manera independiente.

En una primera fase de acondicionamiento, empleamos una distribución global (cuerpo completo o full body) en progresión horizontal (por series). Aquí, y de manera concurrente, en la misma sesión, realizamos un trabajo cardiorrespiratorio organizado en dos bloques, uno al inicio, como calentamiento, y otro al terminar el trabajo de fuerza, empleando la "Escala de Borg" y el "Talking Test" para el control de la intensidad, usando una progresión lógica en tiempo y forma. Ídem estiramientos. Las sesiones no duraban más de 50’ efectivos, repartidos en 2-3 microciclos semanales (según disponibilidad).

A partir del tercer mes fuimos introduciendo una distribución dividida, manteniendo un trabajo de MMII con una frecuencia bisemanal, debido también, en parte, a unas molestias indeterminadas que arrastraba en la rodilla de la pierna derecha.
En ese momento comenzamos con un ratio 1:1 (una semana tutorizada y una semana independiente); las hemos ido espaciando hasta emplear, actualmente, un ratio 1:3 (una semana tutorizada y tres semanas independiente); a excepción de las dos primeras semanas del cambio de mesociclo, que solemos necesitar para conocer y afianzar las modificaciones pertinentes o el nuevo programa, en su caso.

En lo tocante a la alimentación, y coincidiendo con la primera fase de la planificación (primeros dos/tres meses), no definimos ningún tipo de dieta concreta, pero sí enfatizamos en una serie de pautas dietéticas, especialmente, en la de evitar el estrés por comer, es decir, en no obsesionarse y en la de comer comida real, evitando los procesados o disminuyéndolos lo máximo posible. En los siguientes meses usamos distintas estrategias o, más bien, distribuciones a lo largo del año (isocalórica semanal; semanal con una distribución diaria variable; dos fases tipo cetogénica, etc.) —con la gráfica adjunto los protocolos llevados a cabo, tanto de ejercicio como de alimentación, en todos los mesociclos realizados hasta la fecha—.

Actualmente realiza los entrenamientos de manera autónoma, en 2-3 sesiones semana (según disponibilidad), en distribución o rutina dividida y de manera concurrente, junto con el trabajo cardiorrespiratorio; con mi supervisión personal cada tres semanas. Ejecuta los ejercicios adecuadamente, con un buen control postural, y se ha hecho consciente de ciertas pautas de ergonomía y corrección postural que le he ido explicando y hemos puesto en práctica en el gimnasio, las cuales aplica tanto en casa como a nivel laboral.
En los últimos meses no ha dado signos ni síntomas de ninguna índole, en lo tocante a los problemas de rodilla, fascitis plantar y espalda.
La ganancia de fuerza ha sido considerable. En el registro semanal de los respectivos mesociclos, los datos hablan por si solos. Hemos logrado ganar fuerza en todos los grupos musculares y de manera proporcionada.

Las analíticas de colesterol se han reducido y estabilizado (y sí, aún desayunado huevos y sin tomar estatinas). Simplemente ha seguido las pautas de su médico, aumentando el consumo de omega3 en forma de complemento nutricional.

A nivel alimentario hemos conseguido, progresivamente, modificar sus hábitos pasados, pero sin dejar de disfrutar, esporádicamente, de ciertos aspectos culinarios de nuestra zona geográfica.

En sus vacaciones y días libres correspondientes, se lleva una tabla de ejercicio con su correspondiente explicación, donde incluimos trabajo con su propio peso y aeróbicos, la cual realiza la mitad de los días respectivos.

Su adherencia está siendo perfecta (y uso la perífrasis continua, pudiendo usar el verbo en su forma pretérita, puesto que, bajo mi criterio, necesita, al menos, otro año de mejora y, otros dos, para asentar lo conseguido hasta ahora). Si bien, en doce meses hemos conseguido mejorar su composición corporal de manera ostensible, y quiero resaltarlo con los datos de la gráfica que adjunto con el presente, de la que destaco lo siguiente:

  • 22,5cm menos de circunferencia de cintura. 
  • 4,5% menos de grasa corporal. 
  • 10kg menos de peso corporal. 

Me gustaría resaltar, además de la evolución visual vista a lo largo de las semanas y meses, y en los consecuentes controles antropométricos, la talla de ropa, etc., los archivos gráficos (los cuales no voy a mostrar, quedan para uso personal de la interesada); el análisis subjetivo, esto es, la autoestima, motivación, continuidad, perseverancia. En cómo ha sabido escucharme y hemos podido adaptarnos mutuamente, buscando siempre la mejor opción dentro las circunstancias acaecidas en cada momento.

Que decir cabe, que en los próximos meses, y dada la mejora consustancial de su condición física, iremos introduciendo ejercicios de mayor exigencia psico-física y ciertas variaciones en la distribución alimentaria.

Para concluir, añadiré que me hubiese gustado haber medido muchas más cosas y de manera más rigurosa. Pero hay ciertas limitaciones que, al presente, aún no puedo salvar —quien sea ducho en esta materia sabrá de lo que hablo—. Por ejemplo, las fórmulas usadas para el cálculo del % de grasa corporal (podría haber usado otras más completas); también podría haber usado un plicómetro con el correspondiente fraccionamiento en cinco componentes; hubiese sido fantástico haber realizado pesaje hidrostático, o disponer, en su caso, de un análisis DEXA… Sea lo que fuere, seguiré trabajando y estudiando para aumentar mis competencias, tanto las curriculares como las no formales, para así dentro de un año —o el tiempo pertienente—, mostrar una gráfica mucho más completa y mejorada.

Esto forma parte del proceso que inicié hace ya algunos años y que no ha hecho más que empezar.

Muchas gracias a quien lo está haciendo posible.

Seguimos trabajando...


viernes, 23 de septiembre de 2016

Las cosas no suelen ser lo que parecen...

Cada persona, cada individuo, es mucho más que un conjunto de células, que una apariencia, que un patrimonio. Cada uno de nosotros, en su fuero interno, seguro está librando una batalla que resulta imperativo y necesario respetar.

Cada persona es un alma; un conjunto de emociones; todos tenemos un pasado, unos valores y una educación únicos e intransferibles. Nos servimos de una conexión mente y cuerpo ávido de nutrirse de nuevas experiencias que bañen nuestra historia pero, que sin duda, las decisiones tomadas, estarán influenciadas por nuestras experiencias pasadas. Decía Ortega y Gasset que "yo soy yo y mis circunstancias"...

En consonancia, recuerdo un fragmento de texto extraído de un libro (El círculo de la motivación) que tuve la oportunidad de leer hace unos años del cardiólogo Valentín Fuster y que pude guardar en mis anotaciones:

"(...), todos somos iguales. El empresario de Manhattan y la trabajadora social del Bronx viven en universos muy dispares, pero a la hora de la verdad, con el corazón literalmente abierto sobre la camilla de un quirófano, llevan la misma bata, han sentido los mismos miedos y, tal vez, han afrontado los mismos problemas familiares."

Esto último viene a sintetizar la importancia del respeto por cada persona con la que nos cruzamos y a tratarlos con la humildad y seriedad que se merecen. En mi caso, como Entrenador Personal no se me ocurre nada que se presente con más importancia.

Hay una frase del pródigo psiquiatra Carl Jung que resume lo que intento decir:
"Conozca todas las teorías; domine todas las técnicas, pero al tocar un alma humana sea apenas otra alma humana."

No pain more gain

"Los Entrenadores, como profesionales del Ejercicio Físico y la Salud, tenemos, no sólo el deber, sino la obligación de no fomentar el error en los entrenamientos de cualquier persona, tanto usuarios y clientes de los gimnasios, como, por supuesto, en los entrenamientos personales.

Esto se consigue, por un lado siendo consecuentes con nuestras acciones y realizar nuestros propios entrenamientos con el máximo de calidad, atendiendo tanto a la ejecución técnica y variables de intensidad, como a la presencia, educación y respeto por los propios empleados del centro (gerentes, instructores, entrenadores...), los clientes y usuarios, así como el cuidado de las instalaciones y herramientas disponibles.
Por otro lado, hablando y empatizando con los mismos clientes, dando las instrucciones pertinentes cuando sea necesario y ayudando en caso de necesitarlo. En este último caso, por ejemplo, cuando un cliente está realizando un ejercicio por encima de sus posibilidades y solicita ayuda o incluso en caso de no solicitarla, nuestra ayuda irá encaminada a darle los consejos apropiados y hacerle ver que la ayuda no es ni buena ni necesaria y lo que debiera de hacer es poner un peso más apropiado. Otro ejemplo en la ejecución de ciertos ejercicios, hay que dar las instrucciones adecuadas y bajo ningún concepto enfatizar y motivar el error. Por supuesto siempre habrá matices y personas bien preparadas y experimentadas que se podrían beneficiar de tal asistencia o de quizás realizar ciertos movimientos con algo menos de calidad técnica. Pero son casos excepcionales y aislados.

Por lo general el profesional que habla mucho y presume de conocimientos, suele carecer de tales dotes, y si bien pudiese tener los mencionados, aún tendría mayor responsabilidad cuando de dirigirse a los demás se trata.

Busca y escucha a entrenadores no sólo cualificados profesionalmente, sino también competentes personalmente; que te enseñen, que aprendas y te traten con el respeto que mereces. No te dejes engañar por la palabrería, la sugestión. Te estarán y te estarás haciendo un flaco favor. Y no te creas eso de que —es que la alta competición y el rendimiento es lo que tiene, hay que sufrir, incluso lesionarse—, como he podido escuchar en alguna que otra ocasión. Es una burrada y carece de sentido común.

No todo vale...

lunes, 12 de septiembre de 2016

“La incredibilidad no es un argumento válido contra la verdad”.

Varias son las entrevistas realizadas en este primer trimestre del año, algunas de las cuales se han podido materializar en entrenamientos personales, otras en planificaciones con programas de entrenamiento, concretando sesiones supervisadas, y otras, simplemente, procuraban un asesoramiento formal.

Como en alguna ocasión ya he hecho, seguiré compartiendo un resumen de algunos de los casos que se presentan –considero que la inversión de tiempo en escribir y compartir este tipo de sinopsis merecen la pena, cuando hay cientos de personas con unos condicionantes similares a los expuestos y que puedan sentirse identificadas–.

Diversos son los temas tratados, algunos versan sobre objetivos tales como bajar de peso y grasa corporal, ganar masa muscular, reeducación postural…; otros refieren dolor de espalda, así como trastornos músculo-esqueléticos dispares: supeditados, todos ellos, a factores de diversa índole (trabajo, deporte, actividades domésticas…); especial consideración a trastornos y lesiones músculo esqueléticas de carácter deportivo, fundamentalmente de naturaleza indirecta, es decir, esguinces, rotura de fibras, ligamento cruzado, meniscos, manguito rotadores… y alguna post-traumática.

Todas presentan, en mayor o menor medida, dos coeficientes comunes que abarcan todas las franjas de edad y condición física:

- Por un lado, la falta de un adecuado trabajo muscular o el que se realiza, especialmente el referido a la complementariedad de las actividades deportivas, se presenta incorrecto, favoreciendo, en la mayoría de los casos, la descompensación inherente a dichas ocupaciones lúdico-deportivas; que decir cabe, que en no pocas situaciones, la planificación, periodización y/o programación de los entrenamientos, obedecen a criterios que en poco o nada se corresponden con lo fisiológicamente evidenciado y, por ende, pendientes de una revisión, análisis y reflexión por parte de los entrenadores y responsables, cuyo objetivo sea la selección más eficiente de los métodos usados, en pro de una mejora coherente, progresiva y significativa de los receptores de dichas estrategias.
 
-Y de otro –presentándose una relación directa al respecto–, una falta de los nutrimentos adecuados (prótidos, lípidos, glúcidos, agua…), correspondiéndose a una incorrecta elección de los alimentos ingeridos para abastecerse de dichas moléculas, lo que redundará, inexorablemente, en detrimento de la salud y, por extensión, del rendimiento deportivo, laboral y personal.

Todos conocemos casos de personas/deportistas que poseen unas condiciones innatas –suelen tener una genética predispuesta– que pese a todas las incongruencias asumibles, marcarán buenos tiempos, levantarán grandes pesos, saltarán muy alto y muy lejos, ganarán medallas, desarrollarán un físico hercúleo, e incluso se verán como el alter ego de Adonis o Afrodita, y, posiblemente, serán campeones de aquello que se propongan; pero el resto de los mortales debemos hilar muy fino, o cuanto menos, ceñirse a estrategias validadas, elaboradas por profesionales, o, simplemente, escuchar y dejarse asesorar convenientemente. Para todo lo demás: cualquier cosa vale?

Seguimos trabajando…

lunes, 29 de agosto de 2016

Ejercicio Físico: algo da más?

El ejercicio físico es antidepresivo (124), cardioprotector (125), neuroprotector (126), antihipertensivo (127), antiinflamatorio (128), previene el cáncer de pulmón, de próstata, de mama, de colon, de cérvix  etc etc etc (129), es antiobesogénico (130), antiestrés (131), antiálgico (132), osteogénico (133), promueve la neurogénesis (134), aumenta la materia gris (135), mejora la memoria (136) es antisarcopénico (137), y además, ahorra unos 1000 euros por persona y año al sistema de salud (138).

Fuente: muscleblog.es

domingo, 28 de agosto de 2016

Sarcopenia y sus costes

El objetivo de este estudio (Janssen I, et al. J Am Soc Geriatr. 2004) fue hacer una estimación de los costes sanitarios directos  de la sarcopenia en los Estados Unidos, examinando, paralelamente, la proporción atribuible al efecto de la sarcopenia en el aumento del riesgo de la discapacidad física en los adultos mayores de 60 años.

Se estima que una reducción del 10% en la prevalencia de la sarcopenia se traduciría en un ahorro de 1,1 mil millones de $ en costes sanitarios por año.

Resulta repetitivo, pero necesario, recalcar la importancia de que se implementen campañas de salud pública eficaces —y eficientes— destinadas a paliar los efectos  de dicha condición deletérea. Asimismo, a nivel individual, cualquiera que sea tu condición física y tengas la edad que tengas, incluir dos o tres días de un adecuado entrenamiento con pesas, a poder ser bajo la instrucción de un entrenador, resulta una medida clave en la prevención y control de esta y otras muchas condiciones asociadas.

martes, 14 de junio de 2016

Músculo y más músculo

Existe una fuerte y abundante evidencia acerca del papel que desempeña el metabolismo muscular en la génesis, y por lo tanto la prevención, de muchas condiciones patológicas comunes y enfermedades crónicas.

Más que por fines estéticos, el adecuado estímulo y trabajo de la masa muscular cumple con una serie de funciones físicas y metabólicas a lo largo de la vida de cada individuo y de especial trascendencia en la salud de cualquier persona y condición.

La pérdida degenerativa de masa muscular y fuerza al envejecer o al llevar una vida sedentaria (Sarcopenia), es un síndrome generalizado que tiene un efecto devastador sobre la calidad de vida y la supervivencia. Ello se traduce en un aumento de la fragilidad, una mayor probabilidad de caídas, y el deterioro de la capacidad para realizar las Actividades de la Vida Diaria (AVD). Consecuentemente, el desarrollo en una sarcopenia severa deriva en la pérdida de calidad de vida y en última instancia la institucionalización. Con esto se puede deducir que la intervención por medio del Ejercicio Físico y la Alimentación, en la mediana edad o edades más tempranas, es necesaria para compensar los efectos deletéreos de la sarcopenia en la vejez.

Por otro lado, la importancia del músculo en la prevención y/o en el control de la osteoporosis es clara e incontestable. 
Además, se están demostrando los beneficios de trabajar adecuadamente la fuerza y el desarrollo muscular en la prevención de algunas de las condiciones clínicas más frecuentes y cada vez más prevalentes, como la obesidad y la diabetes, entre otras.

Hay poco debate con respecto a los efectos beneficiosos del ejercicio sobre el músculo, ya sea para mantener o intentar restaurar la masa y la función muscular. La cuestión más práctica desde el punto de vista de la salud pública es la motivación. En ese sentido, es importante identificar el régimen de ejercicio mínimo para lograr los resultados deseados, incluyendo la maximización de los efectos interactivos entre la ingesta nutricional y el ejercicio sobre la síntesis de proteínas musculares –se debe prestar especial atención al consumo óptimo de proteínas de alto valor biológico–.

Por otra parte, el resultado deseado se debe identificar en términos de resultados sobre la masa muscular, la fuerza y la función metabólica.

A entrenar... Mejor bajo la supervisión de un Entrenador competente.


miércoles, 4 de mayo de 2016

Caso práctico de entrenamiento personal

En esta ocasión me gustaría exponer, sin explayarme demasiado, el trabajo realizado con uno de mis entrenados/clientes, con el que tengo el placer de colaborar desde hace algo más de dos meses (parecen pocas, pero ocho semanas dan para mucho si se pone interés y saber hacer de las dos partes).

Dicha persona, practicante de fútbol y de pádel, además de aficionado a las carreras populares, acarreaba desde haces unos años, sendas lesiones musculares, con rotura fibrilar –y recidiva– en los tríceps surales de ambas piernas, especialmente en la izquierda. Aún con todo, él seguía practicando sus deportes favoritos cada vez que las molestias remitían –se ayudaba de visitas ocasionales al fisioterapeuta–, pero, dichas mialgias, siempre estaban presentes en mayor o menor medida.

Paralelamente a los problemas surales, manifestaba incomodidad y dolor en el hombro, especialmente al ejecutar determinados gestos de pádel, por ejemplo el smash y sus distintas variantes (remate, bandeja, víbora…), pero su motivación (intrínseca y extrínseca) podía más que cualquier molestia.

Además de la práctica –ocasional– de los deportes arriba mencionados, asistía, una o dos veces por semana, a clases de body pump (la opinión que me merece este tipo de actividad colectiva, así como otras de igual índole, no es el objetivo de este texto, pero decir que suelen causar más perjuicio que beneficio –el ejercicio físico debe ser de calidad y eficiente–. Vale que pudieran resultar “divertidas” y generar un gasto calórico extra, pero no es lo que nos ocupa en la presente planificación, y en mi caso, como entrenador, en casi ninguna).

Es importante añadir, que su preparación para tales actividades era inexistente. Mención aparte merece su tipo de trabajo (profesor) y las posturas adoptadas y mantenidas en el desarrollo del mismo. Esto también se entrena, con lo que ha sido tomado en consideración, y dado las consignas (por escrito) pertinentes al respecto.
Digo “era”, porque desde dos meses al presente, hemos podido revertir, en parte, las molestias que acarreaba. Introducimos entrenamiento de fuerza general (y compensatorio) trabajo de rotadores externos, movilidad articular, estiramientos, ALM (liberación miofascial), técnica de carrera (tobillos, cadera, brazos…), eliminamos kilómetros vacíos, buscando una mayor eficiencia en el programa de carrera, adaptamos uso del pulsómetro (realizando los test de referencia pertinentes que nos dé una aproximación de dónde estamos y dónde tenemos que estar); todo de manera progresiva, en su justa medida y prestando especial atención a la nutrición y al descanso adecuado (entrenamiento invisible).

Quizás, todo esto, pueda parecer algo muy complicado para alguien que practica ciertos deportes solamente por hobby. Pero, realmente, no lo es. Que haya tomado la determinación de ponerse en manos de un Entrenador Personal, de invertir su tiempo y su dinero en que un profesional del ejercicio físico le asesore, planifique y supervise su actividad física, dice mucho.

Nada más que los hechos hablan por sí mismos; sin ir más lejos la primera carrera (6 km) a la que acudió, de las que están planificadas, ha podido correr sin molestias (ni antes, ni durante, ni después), y en los entrenamientos, ídem.

“Sin salud no puede haber rendimiento.”

Seguimos trabajando…

martes, 16 de febrero de 2016

“Apostar por la salud física de tus trabajadores es apostar por tu empresa”

Hace unas semanas tuve la magnífica oportunidad de participar, como Técnico, en un curso de prevención de Riesgos Laborales organizado por CCOO. Se me ha encargado la parte práctica del mismo, concretamente los módulos 5. Anatomía y función de la columna vertebral; 6. Lesiones músculo-esqueléticas y 7. Técnicas posturales, gestuales y de relajación; en relación a la prevención de trastornos músculo-esqueléticos de origen laboral. No me ha sido difícil preparar la presentación ni el contenido, pues es lo que vengo haciendo desde hace unos meses con los Talleres de Escuela de Espalda (y del cuerpo humano)*. –Qué gusto cuando tantas horas de trabajo y estudio se ven recompensadas y vas viendo que pueden ayudar a muchas más personas–.

Haciendo un cuestionario inicial he podido corroborar algo que ya intuía y que, a la par, me serviría para adaptar el contenido de los módulos a las personas que están participando y así hacerlo lo más sencillo, entendible, aprovechable y significativo posible –no se entiende de otra manera–. Se pueden resumir en los siguientes puntos:

• Atendiendo a su profesión, entre los asistentes nos encontramos con Limpiadoras, Auxiliares de Enfermería y Auxiliares de Cocina. Esto nos pone en situación para conocer el tipo de trabajo repetitivo que realizan, las posturas adoptadas durante mucho tiempo, el estrés inherente a las condiciones de trabajo (mucho trabajo y precario, con bajos sueldos –en el mejor de los casos–, inestabilidad laboral y económica, y un largo etc.).

• Con respecto a si padecen alguna enfermedad, lesión y/o molestias de alguna índole, todos en mayor o menor medida presentan alguna o varias. Sin entrar en muchos detalles para no extenderme demasiado, la mayoría presentan dolores de espalda de algún tipo (especialmente lumbalgias y, en segundo lugar, cervicalgias). De todas, aproximadamente el 80%, tienen alguna alteración asociada y diagnosticada, véase hernia discal, protrusiones, espondilolistesis, artrosis facetaria, etc.

• Al preguntar si realizan algún tipo de actividad física a mayores de las derivadas del propio trabajo y quehaceres diarios, resulta en que practican pilates dos días a la semana, van a nadar; aquagym, también dos días por semana; una de esas personas (la más joven) juega al fútbol los fines de semana y, curiosamente, sólo una dice realizar trabajo de musculación, si bien se refiere a clases dirigidas de body pump, gap y similiares (esto es significativo del error profundo de concepto a lo que trabajo muscular adecuado y la dosis respectiva de ejercicio se refiere y que se suma a la cantidad inmensa de mitos en torno a la actividad física en general); otra de las personas dice haber comenzado con spinning pero tuvo que dejarlo por las molestias acaecidas. De todas ellas, la gran mayoría sale a caminar unos dos días a la semana de manera rutinaria.

Siempre me reitero en que ciertas actividades de ocio, como las mencionadas en este último punto, pudieran tener cabida en la actividad diaria de cada persona –aunque algunas, bajo mi opinión, no deberían haber existido jamás en la oferta de actividades de los gimnasios, clubes, pabellones y demás instalaciones de carácter deportivo y relacionados con la salud– si bien, primeramente, debemos focalizarnos en un adecuado trabajo de fuerza-resistencia muscular, en su dosis adecuada e individualizada y con tiempo suficiente para favorecer las adaptaciones pertinentes.

Ya metidos en faena, y conociendo un poco más a cada uno de los asistentes, después de una hora intensa y tediosa de teoría (a mi me encanta, pero entiendo que se haga pesada…) –y así nueve días– en los que han tenido que soportar oírme hablar de vértebras, músculos, ligamentos, sistema nervioso, fascias, etc. (deberán tener paciencia pues nueve días dan para mucho y cuerda tengo para rato…), realizamos una serie de ejercicios de movilidad articular general de todo el cuerpo, dónde ya se empiezan a intuir rigidez, acortamientos, descompensaciones, debilidad, molestias. En días posteriores hemos ido introduciendo ejercicios muy básicos y nos hemos apoyado en el material disponible: gomas, esterillas, etc.
No quiero extenderme más, pero sí que reseñar que: Cuello, Espalda Baja, Hombros, Codos, Rodillas..., son algunas de las zonas doloridas.
En algunos casos, únicamente con la ejecución de estos ejercicios de movilidad, ya tendríamos la dosis suficiente de ejercicio para el primer y/o segundo día y en unas cuantas sesiones ya se verían las mejoras – esto pudiera parecer irrisorio, pero es un hecho el bajo nivel de condición física existente, así como la intensidad de las molestias soportadas en el día a día – con lo que con poco, bien hecho y constante en el tiempo, conseguiremos mucho y muy bueno.

Muchos de los problemas persistentes, sin lugar a dudas, refieren de una serie de descompensaciones musculares, así que, entre otros, el trabajo debe ir en esta dirección. Desde luego que en un curso de esta índole, más bien informativo, dónde sólo disponemos de unas pocas horas prácticas de ejercicio y en el que desconocemos en profundidad la alimentación de los asistentes (no cabe aquí explicar la relación directa entre alimentación y lesiones, contracturas, molestias, etc.), no se podrán obrar milagros, pero sí hacer reflexionar acerca de la importancia del EJERCICIO FÍSICO (con mayúsculas) y del mismo bajo la instrucción y supervisión del PROFESIONAL DEL EJERCICIO FÍSICO, entre otros.

Atletismo y Alimentación para los más peques!

Lo bueno de trabajar con niños en la Escuela de Atletismo, entre otras muchas preeminencias es la de observar parte de la alimentación de los más peques.
No me cabe duda de que sus progenitores y/o cuidadores tenemos la mejor de las intenciones en cuanto a su alimentación se refiere —yo me incluyo como padre—, pero mis inquietudes al respecto y la de muchos otros compañeros de profesión, entran en confrontación directa con lo que se ve y escucha, tanto por parte de los padres pero, especialmente, por parte de los escolares.

Como ejemplo podría aducir que no es de recibo que el niño asista a una competición habiendo ingerido "un vaso de leche con cacao en polvo (de esos tan conocidos por todos) y galletas (de esas también tan conocidas por todos)". Tampoco es tolerable que los niños beban de esas famosas bebidas de sufijo -rade y de colores varios.
Pero lo menos aceptable es que esto sea un hábito diario y que la mayoría de padres —sí, por desgracia, la mayoría— no caigan en la cuenta de que esa no es la alimentación (por llamarla de alguna manera) más adecuada y saludable para sus vástagos. Es más, le podrían acarrear consecuencias perniciosas a medio y largo plazo. Los datos están ahí y son demoledores!

Soy consciente de que, a veces, puede no resultar fácil tener un criterio apropiado cuando de alimentación saludable se refiere —esto último no me lo creo ni yo, pero queda bien decirlo, no?—. En serio, promovamos lo verdaderamente importante; y esto no es precisamente ser el más rápido, el que más salta, el que más corre.., eso ya viene dado tanto por el esfuerzo de los chavales, como el saber hacer de los entrenadores y, por supuesto, el apoyo de los padres.

Sin entrar en muchos detalles: para el día a día un desayuno debe contemplar los siguientes grupos de alimentos y combinarlos entre sí:

- Un cereal (a poder ser integral) —la avena es una buena opción—.
- Una pieza de fruta (de temporada).
- Un lácteo (fermentado mejor que mejor).
- El huevo es un alimento muy completo, por ejemplo.
- Frutos secos (nueces, almendras...)
- Y para beber: AGUA

Estas son algunas opciones y se pueden (y deben) combinar entre sí.


lunes, 15 de febrero de 2016

Iván Rodríguez - Entrenador Personal

Mi nombre es Iván Rodríguez, soy Técnico Deportivo titulado en TAFAD, Entrenador Personal certificado por la NSCA (National Strength and Conditioning Association) y Monitor Nacional de Atletismo por la RFEA, entre otras formaciones. (ver perfil).

Me dedico a la Preparación Física desde hace más de diez años como Técnico Deportivo en Gimnasio Goar Line, Instructor de clases colectivas, Entrenador de Atletismo y Entrenador Personal. Gracias a la base de conocimiento y experiencia que he ido adquiriendo a lo largo de estos últimos años y al trato personal con usuarios y clientes de gimnasios y centros deportivos, así como familiares y amigos; veo necesario ofrecer un servicio profesional integral y de calidad, donde asesorar de manera personalizada y adaptada a las características y objetivos individuales en materia de Salud y Actividad Física, tanto en gimnasios o centros deportivos, como a domicilio o al aire libre.

Mi objetivo es ofrecer la máxima profesionalidad, rigor y dedicación para evaluar, planificar y supervisar mediante la figura del Entrenador Personal o Preparador Físico todo lo relacionado con tus entrenamientos, tú alimentación y estilo de vida, mediante una personalización por objetivos y preferencias; atendiendo siempre a los principios fisiológicos del entrenamiento y basándome en la evidencia científica más actualizada y en mi experiencia y estudio continuo de la relación que tienen el ejercicio físico, la alimentación y el estilo de vida con la salud.

Para ello estableceremos programas eficaces y seguros orientados a mantener y mejorar la condición físico-motriz general, pérdida de peso y grasa corporal, tonificación y aumento de masa muscular, fuerza, educación postural y gimnasia correctiva, readaptación funcional de lesiones, rendimiento deportivo y pruebas físicas; en definitiva, ejercicio físico orientado a la mejora de la salud, calidad de vida y bienestar general. Partimos de la máxima que dice que "sin salud no puede haber rendimiento".

Más información en el correo electrónico info@al4balance.com y en el número de teléfono 638 768 773. Iván Rodríguez